El volcán Herzog

 

Si me agarra uno de mis profesores de cine, lo primero que me diría es que esta metodología no es la correcta para estudiar un director, se debe estudiar cronológicamente.

Pero la realidad es que a Werner Herzog lo conocí a través de “My son ,my son, ¿what have ye done? “(2009). Tan extraña y recomendable que duele. Así comencé mi periplo por el Nuevo Cine Alemán (1966 – 1982), donde surge al mundo Herzog. Todavía no he terminado con el neorrealismo italiano y la Nouvelle Vague, otra falta si quiero estudiar historia del cine con orden, pero este estudio hace que se potencie mi déficit atencional.

Así miré películas de Herzog como “Aguirre la ira de Dios”, “Fitzcarraldo”, “El enigma de Kaspar  Hauser”, pero hoy me voy a detener en una de sus últimas producciones “Hacia el infierno”(2016) disponible en Netflix.

Este documental escrito y dirigido por Herzog, en base a un libro que escribió el vulcanólogo que lo acompaña en el trayecto Clive Oppenheimer, nos lleva a imágenes fabulosas y nos cuenta acerca de los volcanes y las leyendas que los acompañan en Etiopía, Indonesia, Islandia y Corea del Norte (esta parte de la historia es muy interesante porque se usa la leyenda del Monte Paektu para dejar como héroes al clan familiar de Jong-un).

A través de su cine Herzog retrató personajes rebeldes, supervivientes, originales y puestos a prueba por esa originalidad. Personajes que pierden todos los escrúpulos frente al mundo triste, gris y hostil. Esa visión del mundo lo trasladó a este documental, aunque no pueda diferenciar si los personajes son los volcanes o las personas que viven con ellos, todo se conforma en un universo herzogiano.

Belleza y horror con música de Verdi, Vivaldi y cantos gregorianos.